El origen de la agricultura vertical está en la escasez de superficie de cultivo. En 2050 las necesidades de alimento crecerán hasta un 70% por lo que la superficie de nuevas tierras cultivables deberá crecer en el mundo cerca del 20%: el equivalente a la superficie de Brasil.
El crecimiento de este tipo de cultivos es exponencial y no de trata de una moda, las ventajas frente a la agricultura tradicional en determinados países es real y la oportunidad de negocio está atrayendo numerosas carteras de inversión.
Pero no sólo es cuestión de espacio, junto a la agricultura vertical hay otros conceptos asociados que hace de ella un modelo productivo de futuro: economía circular y reaprovechamiento de recursos, seguridad alimentaria total, mínimo coste e impacto ambiental, etc.
Aquí van 5 claves por las que auguramos una larga vida a este tipo de cultivos:
#1 MENOS SUELO PARA MÁS COSECHAS
La agricultura vertical es capaz de producir lo mismo que hasta 10 o 20 veces la extensión de superficie que requiere la agricultura tradicional. Por otro lado en la agricultura vertical se recolecta de media hasta el 90% del potencial cultivado en la superficie que se ocupa mientras que en la tradicional es sólo el 50%.
#2 LOS RECURSOS NO SON LO IMPORTANTE
Del menos del 1% de agua disponible en el planeta válida para el consumo humano, el 70% va destinado al cultivo de plantas y la cría de animales. La agricultura vertical puede reducir la demanda de ese agua de un 70 a un 95%.
Así mismo el sector agroalimentario consume el 30% de los combustibles fósiles que se extraen de la tierra.
#3 VERTICAL Y DESLOCALIZADA
Se calcula que la media que un alimento recorre en el transporte de su lugar de origen hasta nuestro plato es de casi 2.500 km. Distancia que se reduce prácticamente a la nada en granjas verticales que se pueden localizar en las mismas ciudades o los huertos urbanos.
#4 ECOLÓGICAS Y SALUDABLES
Se calcula que la agricultura tradicional ha utilizado 2.300 millones de toneladas de pesticidas en todo el mundo. Un material químico de enorme impacto en el medio ambiente del que sólo se ha obtenido unaeficiencia del 0,1%.
Las granjas verticales de interior poseen una atmósfera protegida que evita las plagas y enfermedades. Por otro lado la producción 100% controlada en las granjas verticales de interior evita cualquier riesgo contaminación por lo que la seguridad alimentaria está garantizada.
#5 EL FUTURO DE LA ECONOMÍA CIRCULAR
La tendencia de las granjas verticales es hacia la economía circular. No solo serán energéticamente autosuficientes sino que además se harán cargo de sus propios desperdicios auto gestionándolos y devolviéndolos a la cadena de producción. Un ejemplo muy gráfico es el concepto de granja flotante desarrollado por un estudio de arquitectura español en el que los restos de cultivo servía de comida a los peces, y las heces de estos fertilizaban la tierra de los cultivos. Todo este proceso mecánico, alimentado con energía solar.
Fuente: Agriculturers.com
