6 ENFERMEDADES MÁS COMUNES DE LAS PLANTAS Y SUS RESPECTIVAS SOLUCIONES
Al igual que los humanos, los vegetales son seres vivos que nacen, crecen, se reproducen y mueren. En este orden natural de la vida también pueden sufrir algunas enfermedades que pueden evitarse o curarse si sabemos interpretar sus señales.
Como bien lo señaló el floricultor español Cristóbal Ortega: “Las plantas también se estresan y hay que entender su problema”.
Los síntomas se manifiestan generalmente por la falta de nutrientes o enfermedades. A veces notamos que las hojas se ponen de color ocre en los bordes, otras veces les salen manchas o se marchitan sus flores, ¿qué significa esto?
Para cada problema hay una solución ecológica para aplicar y algunas consideraciones a tener en cuenta para saber entender a nuestras plantas y proveerles de lo que necesitan en el momento adecuado.
A continuación describimos los 6 problemas más corrientes que encuentran las plantas, los síntomas que presentan y las soluciones –siempre amigables con el medio ambiente- para poder revertirlos.
Problema 1: Exceso de agua
Un error que se comete frecuentemente cuando uno comienza a tener un jardín, es ahogar las plantas por miedo a que les falte agua. Si las hojas se ponen amarillas y marchitas, está regando a su planta por demás. Sin embargo, si no las está regando más veces que lo recomendado, puede ser que también exista un problema con el drenaje del suelo.
¿Cómo saber si le sobra humedad? Si tiene su planta en una maceta, un truco sencillo para saber si la tierra sigue mojada por debajo aunque en la superficie esté seca, es levantar el contenedor y sentir su peso. Si le cuesta trabajo hacerlo, quiere decir que está llena de agua porque no está drenando bien.
Para mejorar el drenaje, agregue arena en la tierra. Si su planta está directamente sobre el suelo y presenta estos síntomas, pruebe trasplantarla a un área más elevada, porque puede que toda el agua del parque o la huerta esté drenando en dirección a ella.
En el caso de cultivos con los frutos bajo tierra, el exceso de riego podría pudrirlos y la calidad del producto disminuye junto a su capacidad de conservación.
Problema 2: Plagas e insectos nocivos
Si su planta está siendo atacada por una plaga de insectos, advertirá que sus hojas tienen pequeños orificios, ya que aquellos se las están comiendo. A los pulgones por ejemplo le gusta tomar la savia de las hojas tiernas.
Para solucionar este problema, no arroje insecticida con químicos, en este caso es peor el remedio que la enfermedad, ya que estos acabarán tanto con los insectos plaga como con los que son benéficos para su jardín.
En cambio si utilizamos fertilizantes orgánicos y naturales, le otorgaremos salud a sus plantas y los insectos nocivos no encontrarán un ambiente propicio para alimentarse y reproducirse, a la vez que no se eliminará a los buenos insectos.
Problema 3: Falta de energía solar
Si su planta se ve con las hojas desteñidas y caídas, puede faltarle luz solar para realizar la fotosíntesis. En este caso colóquela en un sitio más luminoso. Si es de estar fuera de su hogar por mucho tiempo, no cierre todas las persianas cuando se vaya si tiene plantas adentro, o bien muévalas cerca de una ventana o balcón que tenga más luz.
Problema 4: Falta de agua o deshidratación
Si las hojas de su planta se ven oscuras, secas y crujientes al tacto, debe regarla más a menudo y exfoliar sus hojas. Pruebe una vez a la semana con humus líquido, un producto orgánico que se aplica vía foliar.
Problema 5: Exceso de sol
A pesar de que el sol es fundamental para las plantas, cuando es verano y están muy expuestas a él se pueden quemar y esto se debe a que tenemos que cambiar los patrones de riego.
No es bueno regar cuando la tierra está muy caliente, ya que se crearía una atmósfera parecida a una olla y el agua puede convertirse rápidamente en vapor y podría cocer las raíces.
La mejor hora para regar es bien temprano a la mañana o ya por la tarde/noche, cuando los rayos del sol no pueden quemar las plantas, en el caso de que pasaran por las gotas de agua, que harían el efecto lupa. Y es importante recordar que las raíces buscan el agua, no el agua a las raíces, hay que regar bien la tierra, no el tallo.
Problema 6: Carencia de nutrientes
Dependiendo del nutriente del que carezca, las hojas de su planta podrán tornarse de diferente color.
Manchas amarillas o los bordes de ese color, quiere decir que les falta potasio. Agregue compost frutal, o entierre restos de cítricos en su base.
Líneas blancas en sus nervaduras: a la planta le falta magnesio. Agregue compost rico en magnesio.
Líneas amarillas en los bordes y las nervaduras, están señalando una carencia de nitrógeno. Como solución ecológica puede agregar café al suelo para solucionarlo.
Hojas amarillas y nervaduras verdes pero pequeñas, significa falta de hierro. Para solucionarlo, hay que bajar el pH del suelo a menos de 7, y luego reducir el nivel de fósforo en él. Puede ser más sencillo trasplantar.
En todos los casos también es aconsejable colocar al menos una vez a la semana humus líquido diluido en agua aplicándolo con un atomizador. Esta enmienda fertilizadora posee gran abundancia y diversidad de microorganismos beneficiosos, por lo que no es considerado un pesticida, sino que es totalmente orgánico y natural, y enriquece también el suelo.
Los productos fitosanitarios –como el humus líquido- son grandes aliados para recuperar las plantas enfermas y volverlas lozanas, frescas y coloridas. De esta manera, podrá seguir conservando la salud de sus plantas y flores para que puedan seguir aportando belleza y aire puro a sus espacios.
Fuente: Agriculturers.com